El abogado Sebastián Marchisio refirió que la denuncia de Daniel Cesari Hernández en torno a una supuesta agresión de los hermanos Jiménez Astorga dista de las pruebas recolectadas y las declaraciones de los testigos. “Buscamos una absolución total”, aseguró el letrado sobre sus defendidos.
Tras confirmarse la elevación a juicio oral y público por “lesiones” respecto de un hecho suscitado el 5 de abril en el que estuvieron involucrados el doctor Daniel Césari Hernández, juez de Instrucción, y los hermanos Marcos y Damián Jiménez Astorga; uno de los abogados de los acusados, Sebastián Marchisio, aseguró que buscarán la “absolución total” de sus defendidos tras las pruebas colectadas.
“Efectivamente se ha dictaminado la elevación a juicio, no hay fecha todavía pero entendemos que, como viene bastante rápido todo el proceso, será en los próximos meses seguramente, después de la feria de invierno es muy probable que tengamos novedades”, ratificó Marchisio por FM Master’s.
“Estamos abocados a hacer una defensa total en este hecho. Vemos una palmaria injusticia en lo sucedido respecto a los hermanos Jiménez Astorga. Hemos encontrado muchísimas inconsistencias e incongruencias entre la declaración de la víctima (Césari Hernández) con la verdad de los hechos. Hemos encontrado fotografías y testimonios que dan cuenta de una posición diametralmente opuesta a lo que refirió la víctima: que fue patoteado”, desarrolló el letrado.
“Está la desgrabación del 101 y también es incongruente porque él comienza denunciando que lo están agrediendo cuatro personas y vemos que son dos los imputados; manifiesta que está siendo golpeado con borceguíes de obra con punta de acero en la cabeza y la fotografía que está circulando presenta unos rasguños muy leves en el labio y dos o tres horas después vemos un sangrado muy confuso en la misma zona”, fundamentó.
Marchisio, quien trabaja en dicha defensa en conjunto con el abogado Francisco Giménez, apuntó que “no se encontraron lesiones en la cabeza”. “Imagínese que con una patada con un botín de obra de punta de acero en la boca, la verdad, le saca, por lo menos, un par de piezas dentales”, comparó. Y aseguró que hay “tres testigos que manifiestan que, de lo dicho por el doctor Césari Hernández en su declaración, nada de eso es real, nada de eso ocurrió y nadie le pegó”.
“Hay dos que manifiestan que nunca nadie le pegó en el piso y pareciera que se hubiera tirado él solo. Serán cuestiones a probar en el debate”, insistió el representante legal de los hermanos Jiménez.
Por otra parte, Marchisio recordó que “el hecho que se denuncia fue el 5 de abril y estamos a 13 de mayo, cerca de que se fije la fecha de debate”, destacando la “celeridad” del accionar de la justicia.
En alusión a las pruebas, el abogado explicó que “hay dos testigos que no habían sido identificados ni por la Policía ni por la víctima y cuando uno de esos testigos publica en una red social, esto lo ve el fiscal de turno, el doctor López Oribe, y pide comunicarse con esta persona; al día siguiente declara a las 9 de la mañana”. “Ellos dos son quienes dicen que nada de eso es cierto”, sumó.
“Tenemos plena confianza de que vamos a salir airosos de este debate. Buscamos una absolución total de estos dos humildes trabajadores. Se había denunciado ‘robo’, ‘amenazas’ y ‘lesiones’, y el Ministerio Público Fiscal requirió solamente por ‘lesiones’ así que estamos hablando de un delito muy leve pero, no obstante eso, queremos sentarnos en el debate, sentar a los acusados y comprobar su total inocencia”, sintetizó.
“Se han respetado los derechos de los imputados, ha declarado el doctor (Martín) Bramati la nulidad de un requerimiento del doctor López Oribe y una intervención que había tenido la querella intentando modificar la flagrancia por un proceso ordinario. Estamos conformes y queremos ir a juicio para demostrar la inocencia de nuestros defendidos”, reiteró Marchisio.
Consultado por la celeridad de la justicia para actuar en el hecho puntual, el abogado lamentó “que no suceda lo mismo con el resto de los delitos o con el resto de las personas lesionadas en la vía pública, ojalá se actuara así en todos los ámbitos”.
El episodio en el que habría sido agredido el funcionario judicial aconteció cuando, en carácter de civil, Césari realizaba actividad física junto a su esposa y habría advertido sobre una incorrecta maniobra de conducción a uno de los hermanos Jiménez que se dirigía a buscar al restante, el cual realizaba trabajos de pintura en la ciclovía.
La denuncia presentada por la víctima afirma que ambos sujetos lo agredieron físicamente, lo amenazaron y le sustrajeron el celular, sin embargo el juicio llegará a esa instancia únicamente por “lesiones”.
