La salud de 60.000 fueguinos en espera

Mientras la crisis financiera de la obra social provincial se profundiza, los legisladores de Tierra del Fuego siguen sin tomar decisiones concretas para garantizar el acceso a la salud de más de 60.000 afiliados. ¿Qué más necesitan para actuar?
A pesar de la gravedad de la situación y de contar con abundante información técnica, política y financiera, la Legislatura de Tierra del Fuego continúa dilatando el tratamiento de una ley que otorgue mayor financiamiento a la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF). Se trata de una medida urgente, pedida de manera reiterada por diversos actores del sistema de salud y que podría evitar el colapso de la cobertura sanitaria de decenas de miles de personas.
En el recinto ya pasaron todos los actores relevantes: prestadores privados de salud, funcionarios del Ministerio de Salud de la provincia, representantes de gremios, el Tribunal de Cuentas —que presentó un sólido informe elaborado por un equipo multidisciplinario—, y hasta se presentó un cálculo actuarial que certifica el desfinanciamiento estructural de la OSEF, originado en factores ajenos a la gestión actual del organismo.
A esto se sumó recientemente la presidenta de la obra social, quien participó en la reunion de las comisiones de Salud y de Presupuesto de la Legislatura, donde remarcó que desde el año 2021 vienen advirtiendo sobre la necesidad de reforzar los recursos. También dejó en claro el origen del déficit y alertó, una vez más, sobre los riesgos concretos que implica no resolver este problema de manera urgente.
El cuadro es alarmante. La OSEF no solo arrastra un desfinanciamiento crónico, sino que enfrenta dificultades crecientes para garantizar prestaciones básicas a sus afiliados: trabajadores estatales activos, jubilados y sus familias. Mientras tanto, la respuesta política brilla por su ausencia.
Los legisladores tienen todos los elementos sobre la mesa: datos técnicos, informes, advertencias y testimonios. La pregunta es inevitable: ¿qué están esperando para actuar? ¿Cuánto más debe tensarse el sistema antes de que se asuma la responsabilidad institucional que corresponde?
Cada día que pasa sin una decisión, es un día más de incertidumbre para miles de personas que dependen de una obra social que no puede sostenerse sola. La inacción, en este caso, no es neutral: tiene consecuencias concretas sobre la vida y la salud de miles de fueguinos.