El comercio, principalmente en la ciudad de Río Grande, enfrenta una situación alarmante debido a varios factores que incluyen la baja del consumo, como la recesión económica, el incremento en los despidos del sector industrial y los aumentos en las tarifas.
Para ofrecer una visión más profunda sobre esta problemática, José Luis Iglesias, presidente de la Cámara de Comercio de Río Grande, explicó por FM Master’s la complejidad del panorama comercial en la ciudad del norte.
Según Iglesias, la suspensión de aumentos en tarifas podría ser un alivio momentáneo para los comerciantes, aunque no soluciona la caída en la facturación provocada por la disminución del consumo, que ronda el 30%.
Iglesias señaló que, “de acuerdo a la lectura que hemos hecho de lo que ha dicho el ministro Caputo de la suspensión, es para la facturación del aumento que iba a venir sobre el anterior de abrir en mayo que se pospuso para más adelante, para julio o agosto, cuando estuviéramos saliendo del invierno y que la facturación actual se mantiene. Esa es la información que hemos relevado y que la gente de Enargas y otros organismos nos dijeron que, efectivamente, esto es así. O sea, lo que se retrotrae o se suspende es el aumento nuevo que iba a venir y no la facturación que está».
La situación se agrava con la correlación entre la caída del consumo y la inflación, con cifras que oscilan entre el 10% y el 12%, mientras que la facturación sigue una tendencia decreciente. Al respecto, el referente del comercio en Río Grande señalo que «la caída del consumo está en el orden del 30%. En general acompaña a la inflación en sentido decreciente, o sea, con inversión que mantiene una inflación que estamos viendo el orden del 10% 12% el 8,8% este mes y una caída en el mismo sentido decreciente de la facturación».
Ante este escenario, los comerciantes se ven obligados a recurrir a estrategias de supervivencia como el uso del stock o el endeudamiento. Iglesias afirmó: «Esto de alguna forma lo pagás con el stock o endeudamiento. O sea, dejas de pagar o a tu proveedor, a Aref, o los aportes. Si no está el dinero, no está la caja y no te alcanza, lo que sucede es esto».
En cuanto a las perspectivas futuras, Iglesias advirtió que «se va a ver un achicamiento en la fase comercial. Esto es indudable, no hay soluciones mágicas».
Por otro lado, comparó la actual situación con el impacto de la pandemia en el sector comercial, con negocios semicerrados y un cambio hacia modalidades de trabajo online o con despachos. «Hay muchos factores, lo vimos en la pandemia, por ejemplo, que estuvimos con los negocios semicerrados, manejándolo de forma distinta, empezamos a trabajar online o con despachos. Pero también estaba el Estado que ayudó. Ahora creemos que eso no va a estar. La constante es igual en el sentido que se va a achicar la puerta comercial. El consumo no va a crecer», concluyó Iglesias.
