Este domingo a la noche se realizaron las indagatorias por la muerte del joven Franco Agustín García de 21 años, tras recibir una certera puñalada en la zona del abdomen durante viernes por la noche en la plaza Almirante Brown.
Tras el hecho en que el cual García perdió la vida, fueron indagados los dos jóvenes detenidos, Leonardo Paillán de 20 años y Carlos César Toledo de 18; siendo este el único en declarar.
Asimismo fueron trasladados a prestar declaración los dos menores demorados en el marco de esta investigación. Solamente el chico de 17 años, habló mientras que el de 15 años se negó a declarar.
En su declaración el menor de 17 años aseguró que estuvo en el lugar e identificó al imputado Toledo como quien portaba el arma blanca, que aún no aparece en el marco de la investigación.
Por otro lado, se produjeron numerosas declaraciones testimoniales, las cuales apuntan todas a la figura de Toledo como el responsable en portar el arma blanca, precisando el motivo de la disputa en relación a la novia de García, que presenció todo el hecho, y que además declaró en sede judicial luego de ser amenazada por la madre de uno de los imputados.
A pesar que la causa lo compromete de sobremanera, Toledo accedió a declarar ante la jueza María Rosa Santana, y reconoció que peleó con la víctima, aunque argumentó que “se defendió” de una agresión inicial por parte del occiso.
Concluidas las declaraciones, las defensas de los imputados presentaron sendos pedidos de excarcelación, los cuales deberán ser respondidos por el fiscal en el transcurso de la jornada, para resolver antes del lunes la jueza interviniente.
La situación de Toledo al ser la más comprometida torna casi imposible su excarcelación, pero en relación a los restantes imputados en la causa pesará en su contra que no haya sido encontrada el arma homicida, en lo que se cree tuvieron responsabilidad en relación al ocultamiento de una prueba fundamental para la investigación.