Llega el verano y nuestro cuerpo está más expuesto a factores ambientales externos, siendo una época complicada si uno padece ciertas alergias que cobran relevancia en tiempo estival.
Las picaduras de insectos para quienes salen de vacaciones de la isla, la temperatura del agua, la exposición al sol o la ingesta de determinados alimentos pueden desencadenar reacciones alérgicas severas.
El médico del Hospital Universitario Austral (HUA) Ricardo Darío Zwiener, explicó las causales de algunas de esas alergias a tener en cuenta:
Reacciones por tomar sol
Se producen habitualmente por el no uso de protector solar, o por la exposición entre las 11 y las 16. Así, aparecen cuadros de urticaria por vasodilatación y eccemas que suelen empeorar si hay exceso de transpiración.
Alergias alimentarias
Se producen cuando el sistema inmune responde a un determinado alimento en una persona previamente sensibilizada. «Es muy importante leer detenidamente los ingredientes de los alimentos que se ingieren, especialmente leche, frutos secos, en helados y frutas como melón y kiwi en los postres, sobre todo en personas alérgicas al látex. También hay que prestar atención a la presencia de mariscos o pescados en pastas o ensaladas» afirmó el profesional.
Picadura de insectos
«Las reacciones alérgicas a picaduras de insectos son habituales en verano y ésta reacción puede ser de distintos tipos. La severidad puede variar dependiendo de la zona donde el insecto pica, las más peligrosas son en las partes del cuerpo muy vascularizadas como, por ejemplo, la cabeza, los dedos, los labios o los genitales.
Para tener en cuenta, los insectos responsables de producir reacciones alérgicas más severas son las abejas, avispas y hormigas colorada.
Temperatura del agua
Durante el verano hay más aparición de casos de urticaria y en particular de algunas, urticarias físicas que son reacciones alérgicas que se desencadenan frente a un estímulo físico como, por ejemplo, el calor, el frío o la presión.
Acción del polen, los ácaros y otros alérgenos
Por acción del polen, los ácaros y otros alérgenos pueden desarrollarse rinoconjuntivitis alérgica y asma. Zwiener enumeró entre los síntomas posibles a la «congestión nasal con estornudos frecuentes y abundante mucosidad acuosa (rinorrea), lagrimeo y picazón de ojos». Además, se puede desencadenar una crisis de asma con presencia de falta de aire, opresión y silbidos en el pecho.
Consejos para evitar la picadura de insectos
-Permanecer alejado del hábitat de los insectos incluyendo panales y hormigueros.
-Evitar las vestimentas con colores vivos y los perfumes intensos porque esto atrae a los insectos al confundirse con flores.
-Mantener los alimentos cubiertos hasta consumirlos ya que el olor de la comida atrae a los insectos.
-Moverse despacio el estar cerca de insectos voladores.
-No intentar espantarlo.
-No caminar con pies descalzos ni apoyar el torso desnudo sobre el pasto.
-Utilizar repelente.
Recomendaciones para evitar la alergia desencadenada por el polen
-Disminuir las actividades al aire libre durante la mañana debido a que hay una mayor presencia en el aire.
-Mantener las puertas y ventanas cerradas en las horas de máxima polinización.
-Cerrar las ventanillas del auto.
-Utilizar equipos de aire acondicionado con filtros para polen.
-Evitar cortar el césped o acostarse sobre él.
-No secar la ropa al exterior porque los granos pueden quedar atrapados.
-Usar anteojos de sol para disminuir el impacto de los granos en las conjuntivas de los ojos.