El director de la Clínica San Jorge confirmó la decisión irrevocable de finalizar el vínculo con la obra social estatal por incumplimientos económicos y criticó la falta de soluciones legislativas. Médicos podrían suspender atenciones.
La crisis financiera de la Obra Social de Estado Fueguino (OSEF) ha escalado a un punto crítico tras la decisión de la Clínica San Jorge de rescindir su contrato por «incumplimientos reiterados». Carlos Sánchez Posleman, director de la institución, detalló en FM Master’s los motivos que llevaron a esta medida irreversible, mientras alertó sobre el riesgo de un colapso en el sistema de salud provincial si no se aprueban reformas urgentes.
«El 10 de febrero tomamos la cláusula de rescisión por causa previa, con 30 días de anticipación, debido a que no se aumentaron los valores pactados», explicó Sánchez Posleman. El acuerdo establecía que el 50% de los incrementos salariales del escalafón estatal debía trasladarse a los convenios con prestadores, algo que, según afirmó, «no se cumplió, tampoco se pagó en tiempo y forma». Aunque en marzo se acordó una prórroga de 90 días para que la Legislatura abordara el tema, el plazo venció sin avances: «El 10 de junio no se trató, se postergó para el 26 y tampoco ocurrió. Ahora, al 10 de julio, no hay consenso».
El director atribuyó la crisis a un desbalance estructural: «Si con mi sueldo no alcanzo para el supermercado, ¿cómo puede cubrirse la salud si sus costos suben más que los alimentos?». Criticó la «miopía» de algunos legisladores que rechazan aumentar aportes: «Rompen el sistema solidario. Hoy el enfermo paga de su bolsillo porque los valores no alcanzan». Además, señaló que OSEF arrastra problemas de caja por el envejecimiento de sus afiliados: «Los jubilados activos tienen más enfermedades, y eso incrementa el gasto».
Sánchez Posleman advirtió que los médicos –«trabajadores como cualquier otro»-, no continuarán prestando servicios bajo estas condiciones: «Ayer me manifestaron que si no hay solución el 10 de julio, no trabajarán». Recalcó que la clínica y otros prestadores «no pueden sostener deudas ni valores inadecuados», especialmente en un contexto donde «los insumos y medicamentos son cada vez más caros».
Pese a las negociaciones, el titular de San Jorge fue pesimista: «Las reuniones en la Legislatura fueron catarsis, no análisis profundos». Insistió en que la solución pasa por aumentar los aportes de manera solidaria, pero cuestionó la demagogia de quienes se oponen: «Algunos creen que defender el no aumento es proteger al trabajador, pero en realidad castigan al enfermo».
Con el plazo límite a horas de vencer, Carlos Sánchez Posleman cerró con un llamado de atención: «No soy el malo de la película. Hablo con la verdad: si no hay cambios, el sistema se quiebra». La situación, según admitió, ya afecta a miles de afiliados que «confunden el bajo monto de sus aportes con la real capacidad de cubrir la salud». Mientras tanto, la incertidumbre crece: sin sesión legislativa prevista antes del 10 de julio, la interrupción de servicios en una de las principales clínicas de la ciudad de Ushuaia, parece inevitable.