La abogada de Lucía, víctima de abuso sexual en la Base Naval de Ushuaia, presentó un recurso de casación, luego de la absolución del acusado. Argumenta que no hubo perspectiva de género en el juicio.
A partir de este pedido, el Superior Tribunal puede anular el debate y pedir la realización de uno nuevo, con otros jueces.
En el mes de agosto, el Tribunal de Juicio en lo Criminal de Ushuaia absolvió “por el beneficio de la duda” al suboficial principal de la Armada Argentina Reinaldo Cardozo, acusado de abusar sexualmente de una marinera mientras ambos se desempeñaban dentro de la Base Naval de la capital fueguina, en 2013.
Así, el tribunal desestimó el pedido del fiscal mayor Eduardo Urquiza, quien había solicitado una pena de 3 años de prisión para el militar (ahora retirado), de 57 años, por considerarlo “autor material y penalmente responsable del delito de abuso sexual simple en concurso ideal con amenazas coactivas”.
La mujer, de 32 años, tenía 25 cuando ocurrieron los hechos, como consecuencia de los cuales perdió el empleo y su carrera militar, y debió someterse a un tratamiento psicológico y psiquiátrico durante años.
“Cuando supimos de la nueva fecha en 2021 pedimos que se tomen medidas por ciertos comentarios en las redes y se nos rechazó. Pedimos que podía haber una persona de la Secretaría De Derechos Humanos de la municipalidad, pero por protocolo dijeron que no podía haber otras personas en la sala, pero que podía estar afuera esperando”, dijo la abogada de la víctima, Sofía Barbisan, por FM Masters.
Y agregó: “Si bien estaba con mi contención, esta otra persona la podía estar acompañando desde lo emocional. Hubiera sido distinto que la víctima pueda tener a alguien que le pueda tomar la mano en el tribunal, que no te cree, y que eso surge por una mala actitud”.
Además, durante el juicio se conocieron algunas frases que escribió uno de los jueces. “El Tribunal se basó en que no le creían, cuando el juicio desde la perspectiva de género parte de la base que a la víctima hay que creerle, y eso es falta de capacitación, porque la perspectiva de género no tiene que estar en una página, se tiene que sentir. No se la puede tratar de mentirosa, eso no debería haberse permitido”, consideró.
“La defensa tiene que hacer su alegato, pero también desde la perspectiva de género, que, si bien la nombró al principio de su relato, no primó, porque en todo momento se la maltrató”, concluyó Barbisan.
