Ayer por la mañana, el Secretario de Hábitat y Servicios Comunitarios del Gobierno provincial, Alberto Ibarra, confirmó el hallazgo de napas de agua en las dos perforaciones realizadas en la Laguna Seca, con el objetivo de encontrar una solución paliativa mientras, en simultáneo, el gobierno provincial busca acortar los plazos de contratación de una empresa para resolver el problema y concretar una obra estimada en 30 millones de pesos.
Hasta el momento se realizaron dos perforaciones, sin embargo el mismo trabajo se replicará en distintos sectores de la laguna, cuya superficie ronda “entre las 360 y 400 hectáreas”.
Ibarra explicó que “habría que humedecer la mitad y no la totalidad” para detener la gran cantidad de polvo en dispersión que genera la Laguna Seca y causa numerosos problemas a la población de Río Grande.
“Encontramos la napa que estábamos buscando, ahora el trabajo es ver qué rendimiento tiene y cuantificar su volumen para evaluar si sacamos el agua o si no rinde”, explicó el funcionario.
El hallazgo se produjo a los 67 metros de profundidad, y el restante, a 52 metros.
El secretario de Hábitat refirió que, el agua encontrada, “solamente se utilizaría de noviembre a marzo”, etapa del año donde se produce con mayor intensidad el polvo en dispersión.
Contratación directa
En simultáneo, el gobierno provincial “está trabajando en la elección de una empresa para poder llevar esta solución” y, si bien el tiempo inicial de obra constaba de 180 días, “indudablemente se va a acortar mucho”, estimando “una solución definitiva” en octubre o antes.
Cabe destacar que el Ejecutivo resolvió apelar al mecanismo de contratación directa para agilizar los plazos de la elección de la empresa que realizará la obra, por lo cual se esperan novedades en los próximos días.
