Pese a los constantes anuncios del Gobierno provincial sobre la convocatoria a médicos para desempeñar tareas en los hospitales públicos, la situación sigue siendo preocupante. Desde el Sindicato de Profesionales de la Salud (SIPROSA) reiteraron el reclamo de la falta de profesionales y las diferencias salariales entre médicos de planta y contratados.
Al respecto el doctor Julio Torres, integrante de SIPROSA señaló en declaraciones a Aire Libre que “lamentablemente no ha habido cambios; como lo venimos diciendo hace dos años la situación en Río Grande particularmente es preocupante y no ha variado. No vemos que esta preocupación se traslade a las autoridades con respuestas en cambios que se vayan implementando y si no hay cambios en las políticas la solución no va a llegar” al tiempo que aseguró que “hay un descontento entre todos los profesionales; hay migración de profesionales en muchas áreas, hoy le toca a pediatría pero el año pasado ocurrió cuando desapareció el servicio de neurocirugía donde teníamos dos neurocirujanos y ya no los tenemos, en cardiología en diciembre renunciaron dos cardiólogas que ahora trabajan en el sector privado”.
El doctor Torres indicó que incluso hay servicios con un solo profesional como Traumatología, Urología y Oftalmología y que en este último la médica se está por jubilar y atribuyó la falta de profesionales a las diferencias salariales entre los médicos de planta y los que el Estado contrata ocasionalmente. “Estos contratos que nosotros venimos denunciando que se pagan a valores más altos; no discutimos su calidad de médicos, pero si lo que discutimos es la calidad de atención porque no es lo mismo un médico que está en planta y tiene un seguimiento del paciente que aquel que está contratado por un tiempo y se va, por más que sea un Favaloro, no es lo mismo”.
En este sentido el representante de los profesionales lamentó que los contratos hoy “son una regla, no una excepción; en los servicios de Ginecología vienen contratados de Rosario, en nefrología vienen contratados de Buenos Aires, en neonatología de Rosario también, en pediatría también hay contratados, tenemos contratados en todos los servicios y eso habla de falta de gestión” y además hizo hincapié en el éxodo hacia el sector privado “porque son mucho más tentadoras las propuestas y no solo por la cuestión económica, sino que además el maltrato que hay en el sector público a los profesionales es importante. No reconocernos como profesionales ni preguntarnos cuáles son nuestras necesidades, también hace a la cuestión de una calidad de vida diferente”.
Pediatría
Por su parte el doctor Rodrigo Ulloa explicó que el que el sector de Pediatría terminó mal el año y comenzó peor. “En este momento estoy a cargo del servicio y nos hemos enterado en los últimos días que hay colegas que se van, que renunciaron por cuestiones personales y salariales, mientras que a otra se le ha dado la baja. Son cuatro, algunos renunciaron y otros le dieron la baja desde diciembre hasta ahora; realizaban todas las actividades de pediatría: guardia, internación, consultorio y apoyo de guardia con lo cual con su ausencia se resiente muchísimo” por lo que en el servicio quedan nueve o diez pediatras para cubrir 60 guardias al mes. “Lo que ocurre es que somos siete los que hacemos todas las actividades, guardia que es la gran demanda y sala. Lo ideal es que fuéramos quince a veinte inicialmente para tener una mejor distribución y cubrir algunos centros de salud”.
Asimismo, el doctor Ulloa indicó que “estas bajas nos comprometen bastante en este inicio de año y es un llamado de alerta, el servicio de pediatría se va diezmando, hay descontento, no solamente a nivel salarial sino también a nivel de trabajo, el cuidado del profesional cada vez es menor. Uno siente que a igual trabajo hay una diferencia de pago total, 14 mil pesos a un contrato y 4 mil pesos a un médico de planta por una guardia de 24 horas. Estas cosas van cansando y los colegas que lamentablemente se han ido ven la posibilidad de crecer fuera del Hospital y optan por eso”.
