El representante de los trabajadores de la empresa Digital Fueguina, Marcos González, expresó por FM Master’s la difícil situación que enfrentan tras tres años de incertidumbre desde el cierre de la fábrica en Río Grande. En sus declaraciones, González detalló los desafíos que enfrentan y la lucha que continúan librando.
Relató que el día del cierre, al presentarse en su lugar de trabajo, se encontraron con una fábrica vacía de personal jerárquico y seguridad. Desde entonces, los trabajadores han estado buscando respuestas y claridad sobre su situación laboral.
«Lo que pedimos es que haya una resolución, porque son tres años de ser rehenes de una patronal a 3.000 kilómetros de Río Grande», expresó González. Añadió que, pese a que les liquidaron los sueldos hasta agosto, no han recibido la baja formal de la empresa.
Ante la falta de respuesta, los trabajadores decidieron tomar posesión de la planta para resguardarla, ya que no existe personal responsable de la empresa en Tierra del Fuego. González destacó la importancia de la planta, que en su mejor momento empleaba a casi mil personas en tres turnos y producía una variedad de productos electrónicos.
El representante sindical lamentó que, pese al tiempo transcurrido, no han recibido apoyo significativo en su lucha. Muchos de los ex empleados han encontrado nuevos trabajos, pero otros continúan sin empleo y se ven obligados a volver a la fábrica en busca de soluciones.
«Tenemos que avanzar en los procesos legales», afirmó González, subrayando la complejidad de la situación para las 250 familias afectadas. Destacó que, tras la adquisición de Digital Fueguina por parte del grupo Garbarino, las negociaciones se volvieron más difíciles y el contacto con los representantes del grupo se ha perdido desde diciembre.
La situación de los trabajadores de Digital Fueguina en Río Grande continúa siendo precaria y marcada por la incertidumbre. A tres años del cierre de la empresa, siguen buscando respuestas y soluciones para su futuro laboral.
