El legislador analizó los desafíos económicos y ecológicos, destacando la necesidad de generar empleo genuino. Criticó la demora en los fondos del FAMP y solicitó que se evalúe los proyectos que generan mayores puestos de trabajo y no solo recursos para el gobierno.
En una entrevista por FM Master’s, el legislador Raúl Von Der Thusen (Somos Fueguinos) abordó el debate sobre las salmoneras en Tierra del Fuego, un tema que resurge periódicamente en la agenda política provincial. Con un enfoque particular, Von Der Thusen subrayó la importancia de ponderar los beneficios económicos frente a los riesgos ambientales, mientras criticó la falta de avances en la diversificación industrial y la dependencia de fondos nacionales retrasados.
Von Der Thusen fue enfático al vincular la discusión con la crisis laboral en Tierra del Fuego: «Necesitamos empleo genuino antes de ayer. Pero cualquier industria nueva requiere años para implementarse, y estamos en tiempo de descuento». Aquí conectó el tema salmonero con la crítica a la inacción en el Fondo para Ampliación de la Matriz Productiva (FAMP): «Hay casi $200 mil millones pendientes que, de haberse invertido hace dos años, hoy tendríamos industrias funcionando».
El legislador cuestionó el crecimiento desmedido del Estado provincial: «Los recursos ingresados no se tradujeron en mejor salud o educación, sino en burocracia. Si no generamos empleo privado, ¿para quién serán esos servicios? La provincia se está despoblando». Su postura reflejó escepticismo hacia proyectos que solo beneficien las arcas estatales: «No acompañaremos iniciativas que solo sirvan para contratar más funcionarios».
Sobre las Salmoneras
El Legislador indico “Sabemos que hay un proyecto de ley para modificar la normativa vigente y resguardar la producción de salmones», explicó el legislador. «La ley actual no prohíbe totalmente esta industria, pero protege el canal Beagle, tal como lo pidieron los vecinos preocupados por impactos ecológicos». Sin embargo, Von Der Thusen reconoció los desafíos logísticos: «Cultivar salmones en tierra es más costoso, y las empresas deberán asumir esas inversiones».
El eje de su argumentación radicó en la tensión entre desarrollo y sustentabilidad. «Estamos a favor del trabajo, pero también de proteger el medio ambiente. Hay que analizar experiencias internacionales donde esta industria generó recursos, pero no necesariamente empleo masivo», señaló. «¿Qué priorizamos: el ambiente o los ingresos fiscales? Ese debate debe darse con responsabilidad, sin que la coyuntura nos obligue a cometer errores irreversibles».
Puntualmente insistió en un análisis técnico: «Si se permite su instalación en tierra, debe ser con rigurosos controles. No podemos repetir errores de otros países». Y cerró con una advertencia: «La ponderación de derechos es clave. ¿Qué pesa más: el empleo inmediato o el costo ambiental futuro? Eso lo decidiremos en las comisiones, sin prisas ni presiones» concluyó Raúl Von der Thusen.