El subsecretario de Salud municipal de Ushuaia, Pablo Pesce, confirmó la circulación de la cepa, destacó que es más contagiosa pero no más grave e instó a inmunizarse.
Pablo Pesce, subsecretario de Salud municipal confirmó la presencia de la nueva variante de influenza en el país, destacando su mayor contagiosidad pero no su gravedad. Instó a completar los esquemas de vacunación, al tiempo que calificó como «grave delito» la reticencia a inmunizar.
Pesce explicó que la información disponible indica que «es más contagiosa que la gripe común, tiene algún grado de contagiosidad mayor, pero no que es más grave».
Frente a esto, remarcó que la medida principal es «completar los esquemas de vacunación antigripal, porque es una variante del virus de influenza».
Aseguró que «cuando llegue la vacuna del 26, muy probablemente va a incluir esta nueva variante», pero insistió en que las personas de riesgo deben vacunarse ahora. «El que no se vacunó, está a tiempo, se acerca a cualquier centro de salud» de Ushuaia, afirmó.
Respecto a la problemática de la cobertura, el funcionario fue contundente al referirse al movimiento antivacunas. «Eso es grave y es un delito», sostuvo, añadiendo que «hay que empezar a evaluar castigos en los códigos de ética para los profesionales que les aconsejan la no vacunación».
Pesce vinculó esta tendencia con «estas modas conspiranoicas, terraplanistas» y advirtió sobre sus consecuencias: «Después explíquenselo a los pibes que se murieron de coqueluche, o a los casos de sarampión que están dando vueltas».
Sobre la reciente eliminación, por parte de las autoridades nacionales, del requisito de vacunación para cobrar la Asignación Universal por Hijo, Pesce expresó su desacuerdo: «La verdadera respuesta es ‘qué desastre’». Consideró que esta decisión representa un problema, ya que ese requisito funcionaba como un incentivo.
Al ser consultado sobre qué sectores socializan las ideas antivacunas, señaló que, si bien insistió en que el fenómeno «tiene que ver con estas modas conspiranoicas» y que «generalmente las clases populares valoran mucho porque son las que más sufren», actualmente la desinformación se ha extendido. «Ya no es raro encontrar a alguien de un barrio más popular que usa los mismos términos de conspiración en relación a la vacuna», concluyó Pesce.


