El municipio trabaja en un plan por etapas que prioriza seguridad y calidad, con una prueba piloto en alojamientos durante el invierno y una posible expansión hacia el verano.
En el marco de un plan estratégico para consolidar a Tolhuin como destino turístico, el municipio avanza en la apertura gradual de las termas de río Valdez, un recurso natural que hasta ahora había sido destinado principalmente a actividades sociales. Alejandro Pfoh, coordinador de Turismo y Producción de la Municipalidad, detalló en FM Master’s los pasos que se están tomando para garantizar una experiencia segura y enriquecedora, con miras a posicionar el enclave como un atractivo clave para la provincia.
La iniciativa se divide en etapas claramente delineadas. La primera, ya concluida, involucró el uso de las termas por parte de colonias de verano e instituciones. La segunda, en curso, está dirigida a huéspedes de alojamientos registrados y habilitados en Tolhuin, con visitas controladas hasta la primavera. «Estamos trabajando en una mesa con todos los alojamientos para definir la logística: desde el acondicionamiento del piletón principal hasta los servicios mínimos, como sanitarios y cambiadores», explicó Pfoh. El eje, insistió, es la seguridad: «Queremos que quienes visiten las termas lo hagan en las mejores condiciones, sin impactar negativamente en el espacio».
La capacidad se manejará por turnos para evitar saturación, y se está coordinando el transporte habilitado. Este miércoles se realizaba un relevamiento in situ para ajustar detalles. “La semana próxima tendremos información más concreta», adelantó.
Esta fase piloto servirá también para evaluar demandas y ajustar la infraestructura antes de una eventual tercera etapa, proyectada para después de septiembre, que podría incluir una apertura más amplia y diversificada. «Dependerá de cómo funcione esta prueba. La idea es escalar sin perder de vista la sostenibilidad del lugar», señaló.
Pfoh vinculó el proyecto al contexto turístico actual: Tolhuin registró un 73% de ocupación hotelera el último fin de semana, cifra alentadora en una temporada invernal compleja. Las termas, destacó, podrían potenciar esos números. «Son un diferencial para atraer visitantes, pero debemos gestionarlas con responsabilidad», afirmó. Entre los desafíos mencionó variables estacionales, como la transitabilidad de los caminos o la luz solar -escasa en invierno, abundante en verano-, que influirán en la experiencia.
La comunicación con los potenciales turistas será otro pilar. «Estamos diseñando un programa ágil para informar qué alojamientos participan y bajo qué modalidad», dijo. A futuro, el municipio evalúa incorporar más actividades en el predio, siempre con el foco en preservar el entorno natural que define a Tolhuin. «No queremos destruir el lugar, sino mantenerlo como un espacio recreativo y turístico de calidad», concluyó Pfoh.
Con este enfoque paulatino, las termas de río Valdez no sólo buscan sumarse a la oferta turística fueguina, sino también convertirse en un modelo de gestión equilibrada entre desarrollo y conservación. Los próximos meses serán clave para definir su impacto real en la economía local.