El caso data del año 2014 en la frontera de San Sebastián, donde la inspectora Mónica Ojeda y el efectivo policial Gustavo Franzen, se vieron involucrados enun escandaloso caso de contrabando en el que intentaron evadir el control aduanero sobre mercaderías compradas en Punta Arenas, las que pasaron a bordo de un patrullero.
Ambos quedaron detenidos en aquella oportunidad y el caso finalmente llegó esta semana a juicio oral y público en el Tribunal Oral Federal de la ciudad de Ushuaia ante el cual ambos debieron comparecer.
En el breve proceso realizado el fiscal Adrián García Lois, consideró que el contrabando agravado por la calidad de funcionarios de ambas personas, fue “en grado de tentativa”, por lo que reclamó una pena de 3 años de prisión en suspenso.
El tribunal pasó a un cuarto intermedio para este viernes, en el cual ambos imputados podrán brindar sus últimas palabras y luego los jueces pasarán a deliberar un veredicto.