Por Elias García.- Frente a la posibilidad de que las peluquerías reinicien la actividad de atención al público en los próximos días, referentes de este rubro comercial desconocieron contar con información certera y aguardan respuestas por parte de las autoridades, tanto en la parte operativa que implicaría volver a prestar servicios, como así también en la económica, donde hasta el momento no tuvieron ningún tipo de respuestas.
“Todavía no tenemos información concreta. Se dice que nos van a dejar abrir con un protocolo, con varias restricciones, eso es lo que se comenta. Estamos ya más o menos preparados para atender a la gente, para dar turno, por nuestra página de Facebook, por teléfono”, explicó Oscar Zampini, de la peluquería Bamby de Río Grande, por FM Master’s.
“El fuerte de nuestro sector son los niños y si tengo que dar un turno a alguien de algún barrio lejano no sé cómo van a hacer para pasar los controles en vehículo. No sé hasta dónde nos conviene esto”, advirtió.
En ese sentido, el responsable del comercio expresó que los clientes sí contarían con “el comprobante de un ticket donde sale el horario, la fecha, el año y con eso ellos podrían volver a su casa”.
Con un local especializado en corte infantil, Zampini se preguntó “qué cantidad de chicos se podrán atender por día”, teniendo en cuenta las restricciones de circulación, que inhabilitan a los menores a trasladarse por la ciudad, a excepción de la salida diaria de esparcimiento.
Por otro lado, el peluquero manifestó los inconvenientes que existen en la faz económica: “Venimos atrasados con todos los impuestos, alquiler, pago a proveedores. Nos sentimos solos. No tenemos ninguna respuesta de nadie”, afirmó.
“Nos ofrecieron un subsidio desde Desarrollo Productivo del Gobierno de la provincia y completamos todos los formularios y papeles, pero todavía estamos esperando”, profundizó.
“Tenemos que arrancar de cero y mucha gente se atrasó con toda las cuentas. Y nos van a pedir material descartable para atender a la gente: barbijos, máscaras, guantes, alcohol, desinfectante y hay gente que no sabe de dónde van a sacar”, expresó.
En referencia a otros locales similares al rubro, Zampini señaló que una estética que trabaja en un local lindante “viene atrasada en todo, pagó la mitad del alquiler el mes pasado y ya se le viene el otro mes, no saben qué hacer”. “A ella también le pidieron un montón de cosas para atender, está bueno porque estamos en una pandemia, pero estaría bueno que también alguien se acerque a ayudar”, solicitó.
Por último, en cuanto al diseño de un protocolo, el comerciante anticipó que se trabajará con “turnos distanciados, poca gente en el local respetando el distanciamiento social”, aunque sin mayores novedades para la reapertura del local”.