Luego de diez años de servicio ininterrumpido, Aerolíneas Argentinas decidió levantar desde mayo hasta septiembre la frecuencia que une El Calafate y Ushuaia, impuesta en sus momento como estrategia turística.
Si bien se espera la notificación oficial sobre esta decisión, la empresa aduce la “poca rentabilidad del servicio” y la “baja ocupación” del mismo, mientras que el sector turístico expresó su disconformidad ante la medida de los directivos de Aerolíneas.
La información sobre la baja del servicio llegó a El Calafate mediante un operador mayorista que estaba concretando la venta de un grupo de turistas europeos que querían conocer los principales destinos patagónicos. Al querer reservar el tramo El Calafate-Ushuaia se encontró con que no figuraba en el sistema de reservas.