El Banco Central oficializó la obligación para las entidades financieras de recibir billetes de dólar viejos, manchados o dañados sin exigir una declaración adicional de origen. La medida busca incorporar al sistema formal divisas que hoy están fuera del circuito.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) oficializó una normativa que obliga a los bancos a aceptar billetes de dólar deteriorados, antiguos o en mal estado —conocidos popularmente como “dólares bajo el colchón”— sin exigir a los depositantes una declaración adicional sobre su origen. La medida apunta a facilitar el ingreso de esas divisas al sistema financiero formal y a normalizar su circulación.
La disposición alcanza a billetes de dólar considerados “cara chica”, manchados, rotos o con desgaste por el paso del tiempo, siempre que sean auténticos y cumplan con los criterios de validación establecidos por las entidades financieras. Según fuentes oficiales, el objetivo central es reducir las barreras operativas que hasta ahora dificultaban la aceptación de este tipo de billetes en bancos y casas financieras.
Desde el BCRA explicaron que los dólares recibidos serán enviados al exterior para su recambio por billetes nuevos, a través de los mecanismos habituales con el sistema financiero estadounidense. De este modo, las entidades no asumirán el costo del reemplazo, lo que elimina uno de los principales motivos por los que históricamente rechazaban este tipo de billetes o aplicaban comisiones adicionales.
La normativa se enmarca en una estrategia más amplia para fortalecer las reservas y promover la formalización de ahorros en moneda extranjera que permanecen fuera del circuito bancario. Estimaciones privadas coinciden en que una parte significativa de los dólares en manos de los argentinos se mantiene en efectivo, fuera del sistema financiero, en muchos casos por desconfianza o por las dificultades para operar con billetes antiguos.
Desde el Banco Central remarcaron que la medida no implica un blanqueo ni modifica los controles antilavado vigentes. Los depósitos en dólares continuarán sujetos a las normas de prevención de lavado de activos y financiamiento del terrorismo, pero no se requerirá una justificación extra únicamente por el estado físico del billete.
En el sistema financiero señalaron que la implementación será gradual y que cada banco deberá adaptar sus procedimientos internos para la recepción y clasificación de los billetes. No obstante, al tratarse de una obligación regulatoria, las entidades deberán aceptar los dólares que cumplan con los requisitos de autenticidad.
La decisión busca dar una respuesta a un reclamo recurrente de ahorristas y comerciantes, que durante años enfrentaron rechazos o descuentos al intentar operar con billetes de dólar antiguos. Con esta medida, el Gobierno apunta a reducir distorsiones, mejorar la confianza en el sistema financiero y facilitar la incorporación de divisas al circuito formal sin trámites adicionales.
