La concejal Verónica González se refirió a la discusión que durante los últimos meses se dio en la Argentina en torno a la despenalización del aborto y tras la votación, en contra, en el Senado de la Nación y de cara al futuro de la sociedad.
González consideró que se trato de «un proceso ciudadano que vino de la mano de los colectivos feministas que durante años estuvieron solicitando esta posibilidad de liberarlos, y yo también soy feminista, de estos estereotipos de mujeres incubadoras» entendiendo que «tiene que ver con una cuestión cultural y hasta primitiva» el hecho de que no se avala la despenalización del aborto.
González consideró que «hay un nuevo paradigma de la mirada de la mujer respecto de sus libertades y sus decisiones» y consideró que «en el recinto del senado se vio lo contemporáneo y lo que todavía tiene resabio dogmáticos respecto de las cuestiones religiosas» por lo que lamentó que «no se pudo y no alcanzó para que esta ley se plasme en un hecho pero sin lugar a dudas ya no es lo mismo». Ya que «así como no se hablaba de las personas trans, de diversidad o sexualidad, y la palabra aborto tampoco formaba parte de los Medios de Comunicación, de las reuniones de amigos porque era algo que formaba parte de la ilegalidad».
Por lo que «sabemos que son esas cosas que existen, que hay una necesidad y cada vez es mayor de que se legalicen estas cuestiones y hay otras organización que están en desacuerdo porque estas cuestiones tienen que ver con el mercantilismo, quizás hasta con un costado perverso con gente que se está llenando de plata a costa de la sangre de las mujeres».
Por lo que consideró necesario «hablar de frente y hacer saber que esto está ocurriendo, que hay muy pocos que resultan beneficiados de esta ilegalidad y ponernos en ese lado oscuro, de miedo respecto de lo que una decide hacer con su cuerpo». respecto de lo que una decide hacer con su cuerpo».
Y también remarcó que a su entender «es hasta bochornoso saber que tenemos representantes de todas las provincias que ni siquiera saben que legislativamente no pueden llevar al recinto la Biblia» ya que «las cuestiones legislativas las tenemos que diferenciar de nuestras creencias y esto es lo que no se vio, lo que no se entendió».
González opinó que lo resuelto «es avanzar sobre el derecho de las mujeres, esto no es estar a favor de una cosa o en contra de otra» dado que «cuando una dice, yo estoy a favor de mi libertad, no quiere decir que esté a favor de abortar o no abortar».
Aunque confió finalmente de que «más temprano que tarde va a surgir una Ley de despenalización del aborto» como así también confió en que cambiará la conformación de «estos cuerpos colegiados con participación de jóvenes, el dibujo va a ser otro y esto le va a dar cierta frescura y debe haber un equilibrio generacional».
