Desde el comienzo de la cuarentena, el 15 de marzo, las fábricas nucleadas en AFARTE se encuentran paradas. A esto se suma que los niveles de producción de los últimos meses del año 2019 fueron los más bajos de la década.
Ahora, las fábricas debieron elaborar protocolos, cada una con sus particularidades, para volver a la actividad. Los protocolos sanitarios de prevención para el evitar el contagio del Covid-19 están siendo analizados por el Comité Operativo de Emergencia dispuesto por la provincia.
Según el titular de AFARTE, Federico Hellemeyer, “todavía no se han producido las medidas necesarias para volver. No perdemos las esperanzas que en los próximos días la actividad se pueda retomar en algún grado”.
Actualmente, las empresas no cuentan con facturación ni operación comercial, consecuentemente, no hay posibilidad de esperar nuevos ingresos.
“El poco stock que se empezó a mover con la entrega online ya se está agotando. Es probable que los productos que fabriquemos entren en falta en esos pocos puntos de venta que todavía hoy siguen vendiendo nuestros productos”, advirtió Hellemeyer por FM Masters.
Y describió que, desde el año pasado “estábamos con un 57% de capacidad ociosa en promedio en todas las líneas”.
Anunciada la apertura de la cuarentena para algunas actividades, se contempló la posibilidad de que las fábricas vuelvan a producir, por lo que se les pidieron los protocolos sanitarios, que, según el titular de AFARTE “en un 99% ya fue todo enviado “.
“Estamos esperando que el gobierno emita una comunicación formal sobre cada uno de los protocolos, para después tomar la decisión administrativa correspondiente para el restablecimiento de la actividad”, dijo.
Y agregó: “Una empresa que está parada hace 45 días, le dicen que tiene que implementar cambios y lo hace a la velocidad de la luz. Pero entendemos que hay procesos burocráticos y cuestiones que tienen que ver con una decisión política que respetamos. Nosotros queremos que se haga lo antes posible”.
Durante la negociación con los gremios del sector, en la que se llegó a un acuerdo con la UOM, donde se evitaron los despidos pero se bajó el salario de los empleados durante la cuarentena, hubo un sindicato que aún no acordó las condiciones de la vuelta: ASIMRA.
“En todas las seccionales de ASIMRA en el país siempre sucede lo mismo. El sindicato más numeroso negocia las condiciones de trabajo y después ASIMRA replica un poco esa manera”, explicó Hellemeyer.
Y señaló que “ASIMRA en su convenio colectivo tiene una cláusula de garantía, que dice que no puede ganar menos de un porcentaje sobre lo que gana un UOM. Esto habla a las claras de una coordinación que tiene que existir entre los sindicatos”.
Para el empresario, “en cada negociación ASIMRA tiene intenciones genuinas, los canales de dialogo están abiertos, pero en este momento pretenden algo distinto, ya se convino con la UOM los términos de la suspensión correspondientes a los días de aislamiento y nos vemos impedidos de replicar eso con ASIMRA”.
Mañana miércoles habrá otra reunión de partes por videoconferencia con el ministerio de trabajo de Nación donde se intentará llegar a un acuerdo.
