La tipificación bovina alcanzó al 95% de la faena nacional, tras la incorporación de 192 plantas frigoríficas que ya aplican el sistema de categorización de reses en el momento de la faena.
Desde el 1° de septiembre, 46 establecimientos pertenecientes a la etapa 2 del cronograma oficial comenzaron a tipificar. Se trata de frigoríficos que procesan más de 1.000 animales por mes y que cuentan con permiso de tránsito provincial, cumpliendo con la normativa de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca.
¿Qué es la tipificación bovina?
El sistema permite clasificar cada res, en base a tres criterios:
Sexo y edad del animal.
Conformación: proporción entre hueso y carne.
Terminación: relación entre carne y grasa.
Este proceso ofrece una herramienta clave para medir calidad, mejorar la competitividad de la carne argentina y establecer un lenguaje único entre productores, frigoríficos y usuarios de la faena.
Formación de tipificadores
Para que un frigorífico pueda tipificar es necesario contar con un palco de faena y trabajadores habilitados. Hasta ahora, más de 440 personas aprobaron el examen para obtener la matrícula de tipificador bovino, gracias a la coordinación entre el Gobierno Nacional, las provincias y el sector empresarial.
El desafío del 5% restante
El 5% de la faena nacional aún no tipificada corresponde a plantas en proceso de adecuación y a los establecimientos de la etapa 3, de menor volumen de faena, que se sumarán en la próxima instancia.
La tipificación bovina no solo fortalece la trazabilidad y la transparencia del mercado, sino que también impulsa el valor agregado en toda la cadena cárnica argentina, mejorando la comunicación y eficiencia del sector.