La provincia fue descartada para un megaproyecto de inteligencia artificial de US$25.000 millones debido a su limitada infraestructura energética y de conectividad. Una lección estratégica sobre los requisitos para competir en la era digital.
La empresa OpenAI, creadora de ChatGPT, en conjunto con Sur Energy, confirmó una inversión sin precedentes para construir en la Patagonia argentina un mega centro de datos destinado al desarrollo de inteligencia artificial.
El proyecto, denominado “Stargate Argentina”, demandará una inversión total que podría alcanzar los 25.000 millones de dólares y se perfila como una de las infraestructuras más significativas de su tipo en América Latina.
Entre las locaciones analizadas para su instalación se encontró Tierra del Fuego, que finalmente fue descartada por no cumplir con dos condiciones fundamentales: la disponibilidad de una matriz energética sustentable y estable, y el acceso directo a una red robusta de fibra óptica continental.
La exigencia de una fuente de energía limpia y constante, capaz de soportar un consumo de demanda masiva, resultó un impedimento estructural para la provincia insular.
Mientras que Neuquén, la provincia candidata, cuenta con una red hidroeléctrica y parques eólicos, Tierra del Fuego aún depende significativamente de la generación térmica local y carece de una integración sólida al sistema interconectado nacional.
Asimismo, la conectividad de alta velocidad y redundante, crítica para un data center de esta envergadura, no puede ser garantizada desde la isla debido a su condición geográfica y su dependencia actual de un tendido submarino hacia la Patagonia continental.
Este episodio subraya los desafíos de infraestructura que aún enfrenta Tierra del Fuego para atraer inversiones de alto impacto tecnológico global. La imposibilidad de competir por un proyecto de esta magnitud deja en evidencia que, más allá de las políticas de diversificación productiva, la falta de energía verde y conectividad digital de última milla constituyen obstáculos determinantes.
La concreción del «Stargate» en Neuquén, en cambio, reposiciona a esa provincia como un polo emergente, demostrando que la combinación de recursos energéticos y conectividad son la base indispensable para el futuro tecnológico.