Tal como estaba agendado, en horas de la mañana del lunes dio inicio al juicio oral y público contra Yonatan José Parra, quien se encuentra acusado de haber intentado asesinar a un vecino tras una fuerte discusión.
El debate comenzó con la lectura de la requisitoria de elevación de causa a juicio por parte de la Fiscal Laura Urquiza.
Allí la representante del Ministerio Público Fiscal brindó detalles de la causa, en la cual fue enumerando los hechos a medida de que se originaron.
Una vez finalizada la alocución de la Dra. Urquiza, el Presidente del Tribunal Oral le ofreció al imputado prestar declaración indagatoria, medida a la cual accedió por recomendación de su defensor.
Allí Yonatan Parra brindó un breve relato, buscando justificar el enfrentamiento con la víctima Walter Liendro. El joven de 29 años comenzó relatando que días atrás, su vivienda había sufrido un incendio, por lo que se encontraba realizando trabajos de limpieza en el lugar, arrojando dentro de un contenedor basura y todos los elementos dañados por el fuego.
Mientras realizaba el trabajo, observó que Liendro se encontraba a pocos metros, quien comenzó a insultarlo sin motivos, incluso a invitarlo a pelear.
Ante esta situación Parra indicó a los magistrados que “tenía miedo y como tenía un arma que sabía que no andaba, fui a tomarla”, intentando explicar que dicha actitud sería a fin de ponerse a la defensiva.
El imputado agregó que Liendro comenzó a agredirlo, incluso golpeándolo con una botella de cerveza, situación que le provocó diversos cortes. Así fue que habría tomado el arma y debido a que la misma no disparaba, comenzó a golpearle la cabeza con el revólver, pero siempre en una actitud defensiva.
Por otro lado, aclaró que en ningún momento intentó gatillar con el arma, indicando que el revólver lo tiene del año 2015, momento en que un hombre lo habría dejado en un local de comidas que tenía junto al Jugado Federal de calle Libertad y nunca la retiró. Incluso explicó a los jueces que en numerosas oportunidades, intentó disparar el arma en el patio de su vivienda, pero que la misma no se accionaba.
Liendro: “Me gatilló tres veces”
El joven de 24 años, Walter Liendro, fue el primer testigo en prestar declaración en el juicio oral, haciéndolo en calidad de víctima del hecho.
Liendro comenzó su relato indicando que arribó a Río Grande poco tiempo antes del violento episodio proveniente de la provincia de Salta con fines laborales y para intentar reencausar su vida fuera de las adicciones a las drogas.
Residía en la vivienda contigua a la familia Parra, aclarando que no tenía ningún tipo de relación, incluso ni siquiera los conocía. Ese día, al regresar de un kiosco, observó a Parra arrojando diversos elementos a un contenedor. Allí, tras un cruce de miradas, Liendro aseguró que Parra comenzó a amenazarlo, incluso con “pegarle un tiro”.
Ante esta situación, la víctima sostuvo que “le dije si queres pelear que sea mano a mano”, observando que Parra se retiró del lugar, regresando a los pocos minutos, quien al volver a mirarse, aseguró que el imputado sacó un revólver de entre sus prendas y “me gatilló tres veces”. Asimismo, agregó que en ese preciso momento, Parra se le abalanzó y comenzó a golpearlo sobre la cabeza con la culata del arma, provocándole heridas cortantes.
Allí, a fin de intentar defenderse de la agresión, le propinó una serie de golpes de puño para luego tomar una botella de cerveza, con la cual terminó golpeando a Parra.
En ese momento habría aparecido la pareja de Liendro, quien le ayudó a ingresar a la vivienda, al tiempo que se dio aviso a la policía de la situación.
Ofrecieron dinero
La última testigo de la primera jornada del debate oral fue la propia pareja de Walter Liendro. La joven explicó que ella, junto a una vecina, logró sacar a la víctima del lugar del ataque, trasladándolo hacia el interior de la vivienda a fin de realizarle las curaciones de las heridas sufridas.
Previo al testimonio, la Fiscal Laura Urquiza solicitó a los integrantes del Tribunal de Juicio, que la declaración de la mujer se realizara sin la presencia de público, ya que en su gran mayoría, se trataba de familiares de Parra, por lo que se encontraba intimidada para brindar su relato.
La mujer reconoció que Parra habría atacado a su pareja, incluso gatillando el arma de fuego en al menos tres oportunidades al momento en que regresaba del kiosco.
Por otro lado, la joven aseguró haber sufrido intimidaciones por parte de los familiares del imputado. Explicó que se le ofreció una suma de 15 mil pesos en efectivo y un pasaje a Salta para regresar a su provincia. Lo llamativo, fue que la mujer indicó que la “ayuda económica y el pasaje” no tenían un fin específico, situación que podría ser tomada como una intimidación.
Finalmente, la mujer relató a los jueces, que tiempo atrás, integrantes de la familia Parra le habría ofrecido la suma de cincuenta mil pesos a Liendro para que retirara la denuncia.