La vicepresidenta Cristina Kirchner tildó de «fake allanamiento» al que tuvo lugar este jueves en la quinta «Los Abrojos», perteneciente a Mauricio Macri. El procedimiento se llevó adelante con el fin de investigar si el ex presidente violó la cuarentena tras regresar de Europa el pasado 3 de septiembre y tuvo enorme difusión en todos los medios.
También tuvo enorme difusión la reacción de Juntos por el Cambio, sobre todo el sector más duro, que aprovechó la noticia para victimizar a su jefe. A la cabeza se puso otra vez Patricia Bullrich, que acusó a la propia Cristina Kirchner de haber «ordenado» la medida. «A Cristina la mueve el odio, y el Presidente ejecuta su orden. Si no, que expliquen cómo un juez manda a allanar la casa de Mauricio Macri por una cuarentena, cuando el propio gobierno la niega por cadena nacional», escribió la exministra de Seguridad de la gestión de Cambiemos en su cuenta oficial de Twitter.
El comunicado del PJ de la provincia de Buenos Aires, retuiteado por Cristina Kirchner, ofrece otra luz sobre el episodio, y lo coloca en línea con la trama de operaciones de espionaje judicial, mediático, política desarrollada por el macrismo durante su gobierno y que ahora investiga la justicia.
El allanamiento a la quinta de Macri fue ordenado por el juez federal de Tres de Febrero, Juan Manuel Culotta, con el objetivo de acceder a las imágenes de las cámaras de seguridad del domicilio del ex mandatario.
Luego de regresar de unas vacaciones de más de un mes en Francia y Suiza, Macri se reunió en su quinta con intendentes bonaerenses del PRO, previo a cumplir con un aislamiento obligatorio de catorce días.
«FAKE ALLANAMIENTO. Esclarecedor comunicado del Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires», publicó Cristina Kirchner en su cuenta de Twitter. El mensaje adjunta un comunicado que compartió el Partido Justicialista bonaerense en repudio al «montaje» llevado a cabo en el domicilio de Macri.
