El municipio entregó recientemente nuevas licencias para taxis y remises, como parte de su política para optimizar el servicio y beneficiar a los conductores que durante años han esperado la oportunidad de convertirse en propietarios. Gastón Díaz, secretario de Gobierno de la Municipalidad de Río Grande, compartió los detalles de esta iniciativa y su impacto en la comunidad.
La entrega de 40 licencias para taxis y 40 para remises es el resultado de un largo proceso que tuvo su origen en una iniciativa del Concejo Deliberante en septiembre pasado. Esta propuesta, respaldada por unanimidad por los cinco bloques que componían el Concejo en ese momento, permitió finalmente que choferes que llevaban más de 17 años esperando pudieran acceder a la propiedad de sus licencias.
Además de la entrega de nuevas licencias, la ordenanza que regula este proceso introdujo un mecanismo de recupero de licencias. Esto implica que los propietarios tienen ciertas obligaciones y, en caso de no cumplirlas, la Municipalidad de Río Grande podría recuperar las licencias para reasignarlas a otros aspirantes. Este mecanismo asegura que las licencias se utilicen de manera eficiente y contribuye a mantener la calidad del servicio. “Quedó en proceso un mecanismo de recupero de licencia. La ordenanza que refería establece algunas obligatoriedades por parte de los propietarios, que en caso de no utilizarlas permitiría el recupero por parte de la Municipalidad de Río Grande”, explicó Díaz.
La creación de un registro permanente de aspirantes a licencias es otro avance destacado en la regulación del transporte público en Río Grande. Anteriormente, este registro solo se generaba en el momento de la entrega de nuevas licencias, lo que limitaba las oportunidades de los conductores interesados en obtener una. Ahora, con un registro permanente, los aspirantes tendrán más posibilidades de acceder a una licencia cuando se produzca el recupero de alguna. Díaz afirmó que “a medida que se vaya produciendo este recupero de algunas licencias, van a ser entregadas a quienes sigan en ese orden”.
En cuanto al servicio de Uber, Díaz reconoció que el tema sigue siendo un desafío dentro de la agenda municipal. La normativa vigente en Río Grande prohíbe el servicio de Uber, pero un fallo judicial reciente ha complicado la situación. Este fallo declaró inconstitucional que se exija a un vecino contratar un servicio de transporte de una manera específica, lo que ha llevado a la necesidad de compatibilizar esta decisión judicial con la normativa local. “Nosotros en función del fallo, aquellos transportes habilitados que utilicen la plataforma no estamos labrando actas de infracción. Es decir, no nos estamos metiendo, como dice el fallo, no nos estamos involucrando y no estamos controlando la forma en que el vecino elige vincularse con un transporte habilitado”, explicó finalmente Gastón Díaz.
Este conjunto de medidas del municipio de Río Grande persigue una mejora continua del transporte público, buscando un equilibrio entre la normativa local y las necesidades de los vecinos y conductores.
