El capitán de corbeta, Juan Manuel Garita, de la base conjunta Orcadas relató los pormenores de la asistencia y posterior derivación de remeros profesionales que protagonizaban una travesía extrema en aguas antárticas.
Garita refirió que el 16 de enero recibieron en la base la solicitud de asistencia médica para un tripulante del velero Selman, que venía haciendo de soporte a un equipo de seis remeros que realizaban una travesía desde la isla Rey Jorge, la base polaca Trotsky, hacia las islas Georgias del Sur, emulando la ruta del explorador irlandés Ernest Shackleton, que hizo esa ruta en el año 1915.
“Tuvieron un problema con uno de los remeros que tuvo un gran cuadro de deshidratación, lo pasaron al velero y el velero pide ayuda para este hombre” organizó los datos el jefe de Orcadas.
El día 17 el velero arribó a bahía Scotia alrededor de las 14 horas. De inmediato se desembarcó a la persona afectada para “brindar la primera asistencia a este hombre que venía complicado de salud”, por parte del equipo de la base.
La situación que presentaba el primer remero fue que “se descompuso por el viento del bote, no soportó el mareo, se descompuso, empezó a vomitar, y debió ser trasladado al velero”. En virtud de la imposibilidad de recuperación, fue que el capitán de velero pidió la asistencia médica a Orcadas, lo más cercano en su ruta.
Durante el transcurso, “nos piden que atendamos a otro remero, una chica que tenía a principio de congelamiento en los meñiques del pie”. Luego de esa segunda atención, sobreviene una tercera: “después baja un tercer hombre, que se le da también asistencia por principio de congelamiento en los pies”.
El médico de la base decidió enviar a las tres personas derivadas “para tener una mayor atención médica, porque la atención médica es limitada y requerían un poquito más de estudios” consignó Garita. Y luego sumó en su relato a un cuarto afectado, esta vez con un cuadro de disnea, por lo que los evacuados con parte médico fueron cuatro.
Así se inició, a través de la cadena de comando, la evacuación de las personas, con la intervención del Área Naval Austral con base en Ushuaia: “se hacen todas las coordinaciones necesarias. Toma intervención el aviso ARA Puerto Argentino, que viene a hacer el rescate y la asistencia para llevar a esos hombres a Ushuaia”.
La expedición, británica, estaba compuesta por el jefe, de nacionalidad islandesa, la remera austríaca, dos estadounidenses, un búlgaro y un británico, estos dos últimos los únicos que no tuvieron ningún problema de salud.
El marino oriundo de Balcarce, Provincia de Buenos Aires, explicó que el bote en el que navegaban “está especialmente diseñado para cruces oceánicos. Esta expedición la realiza gente que tiene varios cruces oceánicos, el capitán del bote era el sexto cruce oceánico, ya cruzó los cinco océanos del continente, y este era su sexto”.
En cuanto a su estado de salud, se limitó a remarcar que “de acá (de Orcadas) salieron estables, mejorando, obviamente, los que tenían principio de congelamiento también iban mejorando, así como también el hombre que estaba deshidratado, se fue con un pronóstico favorable”.
Finalmente, el capitán de corbeta consignó que son habituales este tipo de operativos en esta época del año en Antártida, en virtud de la buena cantidad expediciones y travesías que se llevan adelante. “Particularmente en la base Orcadas, durante esta temporada hemos tenido la primera del año. Pero siempre vienen veleros a resguardarse de los temporales veleros” concluyó.
