El conflicto salarial docente continúa sin resolverse y el calendario escolar está lejos de cumplirse. En varios establecimientos, los alumnos tuvieron apenas un tercio del ciclo lectivo.
La situación educativa en la provincia atraviesa uno de sus momentos más críticos. A casi dos meses del cierre del ciclo lectivo, el conflicto salarial docente sigue sin una resolución definitiva y no existe hasta el momento un plan concreto de recupero de clases.
El calendario oficial preveía 190 días de clase, pero en la práctica el número dista mucho de cumplirse. Según datos relevados por Tiempo Fueguino y testimonios de distintos establecimientos, la cantidad efectiva de jornadas dictadas varía —según el colegio— entre un 30 y 40% del total previsto.
Esta mañana, en diálogo con FM Master’s, una docente de la escuela Kayu Chenen explicó que los alumnos “tuvieron menos de 50 días de clases en lo que va del año”. La situación se repite en otros establecimientos de Ushuaia y Río Grande, donde las desobligaciones y medidas de fuerza impidieron sostener la continuidad pedagógica.
Desde el Ministerio de Educación informaron que el ciclo lectivo finalizará el 19 de diciembre, pero los plazos ya no alcanzan para garantizar el mínimo exigido. “Sin el dictado completo de los contenidos, evaluar es muy difícil”, reconocen desde la propia comunidad educativa.
A la falta de un plan de contingencia se suma la controversia jurídica: el Fiscal de Estado cuestionó recientemente la legalidad del sistema de desobligaciones y su posterior registro administrativo, lo que podría generar dificultades para la contabilización real de los días trabajados y el dictado efectivo de contenidos.
Mientras tanto, familias y docentes coinciden en un punto: más allá de la lucha por la recomposición salarial, se necesita una definición urgente que garantice la escolaridad de miles de estudiantes fueguinos antes del cierre del año.



