Una comerciante de ropa de mujer relató la drástica caída de las ventas, las estrategias de descuentos forzados y la incertidumbre para sostener su negocio, en un contexto económico adverso que afecta a todo el rubro.
La propietaria de un local “Izel Moda” de indumentaria femenina de Río Grande expuso, en FM Master’s, la grave realidad que atraviesa el comercio minorista, con ventas que han caído a niveles mínimos.
La comerciante, “Rita” detalló que atraviesan un lapso en los que se alcanza a vender solo un 30% o 40% de lo esperado, y semanas completas sin concretar ninguna operación. Para intentar sustentar el local, ha implementado descuentos del 30% y hasta ofrece tres cuotas sin interés en prendas de oficina, estrategias que resultan insuficientes.
Relató que tiene vestidos de calidad en 25.000 pesos y un sector outlet con precios accesibles, como camisas a 10.000 y 15.000 pesos, que no logran captar compradores.
La situación se agrava con la constante entrada de clientes que solo miran precios y se retiran sin comprar, lo que genera una profunda frustración y sensación de impotencia. “Ya no tengo ideas, ya no sé qué hacer”, afirmó.
La incertidumbre de cara al fin de año y el receso de verano es palpable, especialmente con stock de invierno sin movilizar y la necesidad de pagar alquileres, servicios e impuestos de manera inflexible cada mes.
La comerciante manifestó finalmente su esperanza de que la situación mejore, aunque admitió haber agotado todas las instancias de reclamo sin recibir ayuda. Su testimonio refleja un panorama generalizado de cierres y liquidaciones forzosas en el sector, en la ciudad de Río Grande.