El titular de la Clínica San Jorge de Ushuaia inauguró un policonsultorio con un centro de medicina nuclear en Río Grande. Destacó que la obra busca evitar que los pacientes deban trasladarse hasta Ushuaia y reducir costos para el sistema.
Carlos Sánchez Posleman, titular de la Clínica San Jorge de Ushuaia, confirmó la inauguración de un nuevo centro de salud en la ciudad de Río Grande. “En realidad lo que hemos inaugurado es un policonsultorio con un centro de medicina nuclear”, explicó durante una entrevista en FM Master’s. El empresario detalló que el proyecto surgió al identificar una necesidad concreta en la población: “parte de un 30 o un 40% de los pacientes que atendíamos nosotros venían derivados de Río Grande”.
La decisión de invertir respondió a un objetivo claro. “Creímos oportuno hacer el esfuerzo de invertir en un servicio para que la gente de Río Grande no tuviera que venir a Ushuaia. Y también para abaratar un poco los costos para el financiador de la salud”, afirmó Sánchez Posleman. Subrayó que cualquier paciente “tenía que pagar no solamente la práctica sino todo lo extra que significa el traslado, el alojamiento en algunos casos”.
El proyecto se concretó a pesar del contexto nacional. “Tomamos la decisión independientemente que las situaciones del país nunca son las adecuadas. Pero, bueno, si uno espera que se den las situaciones adecuadas nunca hubiéramos invertido”, reflexionó.
El nuevo centro contará con “un centro de medicina nuclear que no había en Río Grande, con un laboratorio y con consultorios con distintas especialidades, con una fuerte orientación cardiológica pero también con médicos de cabecera para PAMI”.
Respecto a la generación de empleo, Sánchez Posleman indicó: “Son más o menos unas 15 personas, independientemente de los médicos, entre técnicos, administrativos, personal de maestranza, enfermeros”.
Sobre el monto de la inversión, aclaró que el edificio es alquilado y fue construido especialmente con el fin específico por la empresa Zapco. En cuanto a los equipos, especificó: “El equipo es un equipo de 150 mil dólares como básico de inversión, el costo del equipo, a eso hay que sumarle todo lo que es la instalación del equipo de medicina nuclear, un ecógrafo de última generación que también está alrededor de esos 150 mil dólares y después la parte del laboratorio de otros 100 mil dólares más”.
El empresario enfatizó su visión sobre el rol social de la empresa privada en salud. “Estoy convencido, o es lo que mamé de muy chiquito, que cumplimos un rol social importante, o sea, independientemente de que sea un efector privado”, manifestó. Finalmente, Carlos Sánchez Posleman agradeció a la comunidad de Río Grande: “nos ha recibido muy bien, y ha colaborado mucho, y todos han deseado que tengamos éxito”.