La «Huelga Global por el Clima», convocada en simultáneo en varios países, buscó advertir a los gobiernos sobre la gravedad de la situación ambiental y sus consecuencias irreversibles. También coincide con el desarrollo de la Asamblea General de ONU.
En nuestro país, los pedidos son concretos: Que se sancione la Ley de Humedales antes de fin de año; que se implemente correctamente el “Acuerdo de Escazú” para que defender a los y las defensoras del ambiente; que se genere cuanto antes un plan de acción y financiamiento para la adaptación al cambio climático.
Para los fueguinos, esta movilización planetaria llega en un momento de avances y expectativas sobre la cuestión ambiental. Ocurre a pocos meses de aprobarse una ley que prohíbe la cría de salmónidos en las aguas provinciales y que hizo posar los ojos del mundo sobre este logro. A esto se suma la posibilidad de que la Legislatura comience a tratar un proyecto que, tal como lo anunciara la secretaria de Ambiente Provincial, Eugenia Álvarez, significaría que “el área Protegida Provincial Península Mitre sea una realidad y para nosotros, un reconocimiento a toda la sociedad fueguina que en realidad ha sido la mayor propulsora”.
Cabe destacar que Península Mitre es uno de los pocos espacios naturales en el planeta que resiste al avance de la humanidad, manteniendo sus paisajes vírgenes y casi prístinos. Preservar sus turberas y sus bosques marinos resulta fundamental para capturar y retener las emisiones de carbono de la atmósfera, una de las principales causas de la crisis climática que atravesamos.
Península Mitre debe ser protegida por Ley, permitirá comenzar a diseñar un plan de manejo, resolver y definir la zonificación, pautar actividades y cuáles van a ser los accesos habilitados, entre otras acciones. La autoridad de aplicación, con las mesas técnicas y los actores definidos en sus roles, podrán ordenar el territorio y trabajar con la comunidad de una forma mucho más efectiva. Esta norma incorporaría a esa zona al Sistema Provincial de Áreas Protegidas.
Esta acción mundial incluyó más de 2.500 acciones virtuales motorizadas por referentes de Juventud por el Clima, encabezados por Greta Thumberg.
En la ciudad de Buenos Aires, la colorida marcha partió desde Plaza de Mayo cerca de las 17 rumbo al Congreso. Se sumaron a la convocatoria marchas en las ciudades bonaerenses de Bahía Blanca, Bragado, Campana, Mar del Plata, Pinamar, Punta Alta y Villa Gesell. Lo mismo que en Concordia (ER) y Gral. Roca (RN), entre otras.
Además, se realizaron movilizaciones similares en las capitales de las provincias de Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Córdoba, Corrientes, Mendoza, Misiones, Neuquén, Salta y Tucumán. En Tierra del Fuego, la concentración se realizó en Ushuaia, frente a la Casa de Gobierno.
En el último informe del Panel Internacional de Expertos (IPCC) de Naciones Unidas ratificó que no hay región, población ni mar en la Tierra que esté a salvo de las consecuencias producidas por el cambio climático.
“Sin precedentes en siglos”, la suba del nivel de los mares, las olas de calor, sequías y tormentas están “inequívocamente” asociadas al calentamiento global provocado por la actividad humana.
Por este motivo muchísimas personas, en su mayoría jóvenes, marcharon en todo el mundo pidiendo a los representantes de sus países la urgente toma de conciencia y la creación de políticas públicas concretas que aseguren la posibilidad de un futuro económico y social justo, hoy en riesgo por nuestras propias decisiones.
