Asimismo, se subraya la manipulación de la pauta oficial y, puntualmente, «la cancelación de programas en los medios públicos». Sobre este caso en particular destaca «eventuales presiones políticas».

«Amplios sectores, tanto entre quienes apoyan al gobierno como de la oposición, continúan observando a los medios y a los periodistas como actores alineados a uno u otro lado del espectro político, lo que contribuye a cuestionar la credibilidad del periodismo y su rol en la democracia», apunta el Resumen Ejecutivo de ese informe, según divulgó la agencia Télam.

Además, agrega que se «recibió información sobre ataques e intimidaciones contra periodistas, tanto en el marco de investigaciones sobre crimen organizado y corrupción, como en situaciones de protesta social o movilizaciones políticas».

«También se registran denuncias sobre uso desproporcionado de la fuerza en el contexto de protestas», puntualiza respecto de la Argentina.

«En cuanto a la política de asignación de la publicidad oficial, las autoridades afirman que han adoptado una serie de decisiones para racionalizar el uso de este recurso público y que se basan en la aplicación de un reparto más equitativo y transparente de la publicidad estatal que respeta el trabajo de los periodistas, incluso los críticos», añadió.