3.9 C
Río Grande
19 de abril de 2024

Homenajes: San Martín también fue víctima de “la grieta”

Sin ese hombre no se puede pensar el nacimiento de la Argentina. Lo vemos como un ejemplo de austeridad y sabiduría, con una ética inmunizada contra todos los vicios del poder. Pero el héroe de la patria también fue víctima de la grieta.

Este es el comentario hecho por una descendiente de una familia patricia de Buenos Aires que figura en el libro Sin Espejismos, de la historiadora Ema Cibotti:

“El tío Pepe era un ordinario, un grosero, que hablaba como gallego, se casó con una Escalada para hacerse conocer”.

Son palabras de una descendiente directa de los Escalada, la abuela materna de María Rosa Oliver, una conocida intelectual argentina del siglo XX, confundadora de la revista Sur con Victoria Ocampo. Más tarde sería amiga del Che guevara y visitaría Cuba y China.

Cuando María Rosa contaba en familia que su abuela, descendiente de los Escalada hablaba de esa manera tan despectiva de su tío José de San Martín, el yerno de la Oliver la corregía con dulzura: “Si era hijo de españoles y se educó en España, como quería tu pobre abuela que hablase San Martín?”.

La escena aparece en la autobiografía de Oliver, y forma parte de las memorias de la oligarquía argentinas de comienzo del siglo XX cuando la cuestión era tema de pocas familias.

El origen de ,los chismes sobre San Martín tiene su origen. El Libertador tuvo una muy mala reacción con Carlos María de Alvear, con quien primero fueron aliados y después enemigos en la Logia Lautaro, un odio que tuvo sus consecuencias sobre el curso de la Revolución.

En el libro de Cibotti queda claro que lo que Alvear nunca toleró fue la independencia de criterio de nuestro máximo héroe. Todos los agravios y descalificaciones contra San Martín tienen una única usina: nunca se avino a los actos de subordinación que le exigía la clase alta a la que pertenecía Alvear y sus aliados.

Se le había advertido a San Martín que en sus largas ausencias su mujer se dedicaba simplemente a tejer, jóvenes militares la visitaron varias veces y se activaron las malas lenguas.

En 1915, el historiador Vicente Quesada dio una conferencia hablando de la chismografía política y social en contra de San Martín y de su amigo el general chileno Bernardo O’Higgins

Llegó a distribuirse en Mendoza y en Buenos Aires una caricatura terrible en la que San Martín aparecía con orejas de burro sobre el lomo de otro burro que era O’Higgins, arriando un rebaño de ovejas camino a Chile. Era un burla al cruce de los Andes.

El patriciado porteño lo llamaba “el soldadote”, y nunca fue aceptado por la élite colonial.

Se pone en evidencia el desprecio con el que la clase alta trataba a quienes no habían nacido en cuna de oro.

Y durante mucho tiempo más, las familias de cierta clase siguieron produciendo grietas.

 

Compartir

También podés leer

«Nunca hemos tenido la oportunidad de que Caputo nos escuche”

El ministro de Economía de la provincia, Francisco Devita,...

Superfecha en el cochocho

USHUAIA (Por Lien Tapia).- El domingo en el “Cochocho...

Desde AFARTE advierten sobre la poca información en torno al sub régimen

La licenciada Ana Vainman, directora ejecutiva de AFARTE, Asociación...

Senadores aprueban aumento de dietas sin debate ni consulta

En una movida sorpresiva durante la sesión de este...