En un comunicado de prensa, la empresa explica que el conflicto en la planta data de 2018, cuando se firmó un acuerdo homologado por el Ministerio de Trabajo, que también fue aceptado por el sindicato de químicos y petroquímicos, y que “hoy desconocen frente a sus asociados, y las instituciones en general”.
La empresa se refiere al convenio firmado el 26 de septiembre de 2018, que derogaba otro acuerdo previo del 2012, que según la empresa, el sindicato ahora desconoce.
“Después de tres conciliaciones obligatorias donde realmente no hubo intención de diálogo, ya que se quería retrotraer a la situación anterior al acuerdo ya derogado, procedimos al despido de los miembros más agresivos en medio de una nueva medida de fuerza, con todas las liquidaciones y pagos correspondientes. Sin dudas, la empresa respetó el derecho a huelga, y siempre lo ha hecho, pero nuestros derechos no fueron respetados, ya que la empresa también tiene derecho a ejercer toda industria lícita, y los trabajadores no adheridos, también tienen el derecho a trabajar”, dice el comunicado de Tecnomyl.
También hace referencia a la solicitud del Sindicato de reincorporar a los despedidos, que fue desestimada por el juez laboral Hugo Fernando Cayzac, para que continúe por la vía judicial, luego de lo cual “el Sindicato comenzó a aumentar su agresividad, y con nuevas medidas de fuerza y acampe lograron ilegítimamente bloquear el acceso a la planta al resto del personal, camiones, proveedores y hasta reteniendo contra su voluntad al personal no adherido, cercenando el derecho constitucional de la empresa y de los trabajadores, generando millonarios daños”.
“Tras varias denuncias, el juez de Instrucción Raúl Sahade, les exigió por orden judicial que permitan el ingreso y egreso de directivos y empleados que no adhieren al paro, o de lo contrario los procesaría por desobediencia a la Justicia, incumplimiento a la orden judicial y citarlos al Juzgado penal. El día 18/7/19, y ante nuevos cortes, cerca de 25 trabajadores fueron notificados por el delito de coartar la libertad de trabajo en la planta. Por último, cabe aclarar que los nuevos ingresos temporales estaban planeados desde hace tiempo – proyección de producción Año 2018 -, y es para atender una nueva línea de producción que no tenía dotación propia”, explica Tecnomyl.
Y expresa “toda su intención de resolver el conflicto por la vía institucional. Tecnomyl reitera su apuesta al dialogo y al consenso, pero en una mesa en la cual puedan libremente las partes negociar, sin extorsiones previas o posteriores, y que pueda evidenciarse lo que pretende el sindicato de trabajadores químicos (SUTIQyP) en representación de los mismos”.
En tanto que los empleados despedidos se encuentran realzando protestas desde ayer, en las puertas del ministerio de trabajo, donde exigen la intervención del ministerio para la reincorporación de los cesanteados.